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Orientación Universidad
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Apuntes psicología social de la educación, Ejercicios de Psicología Social

Asignatura: Psicología Social de la Educación, Profesor: Agustin Godás Otero, Carrera: Pedagogía, Universidad: USC

Tipo: Ejercicios

2017/2018
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Subido el 15/04/2018

andreasousac
andreasousac 🇪🇸

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¡Descarga Apuntes psicología social de la educación y más Ejercicios en PDF de Psicología Social solo en Docsity! PSICOLOGÍA SOCIAL DE LA EDUCACIÓN GRADO EN PEDAGOGÍA PROFESOR AGUSTÍN GODAS OTERO Andrea Sousa Calderín TEMA 2. Percepción social: comprender a los demás. Comunicación no verbal: el lenguaje de las expresiones, miradas y gestos. El comportamiento social con frecuencia está influida por factores o causas temporales. Los estados de ánimo y emociones cambiantes, la fatiga, las enfermedades, las drogas… pueden influir la manera en la que pensamos y nos comportamos. Como estos factores temporales afectan en el comportamiento y en el pensamiento social, normalmente nos preguntamos cómo le afectan a las personas de nuestro entorno. Para descubrirlo, podemos hacerlo de forma directa, es decir preguntándoles. Estrategia que normalmente falla, pues estos buscan de forma activa encubrir dicha información o incluso mentirnos a cerca de ella. En estas ocasiones, acudimos a otras estrategias menos directas. ¿Cómo? Prestando atención a las señales no verbales (contacto visual, movimientos…) De este modo, cuando alguien intenta esconder sus sentimientos, suele descubirlos a través de señales no verbales. La información transmitida de esta forma y nuestros intentos por captarla constituyen así, la comunicación no verbal. Las señales verbales emitidas por otros pueden afectar a nuestros sentimientos, aún inconscientemente o al imaginarnos como se siente la otra persona. Esto es el contagio emocional de Neumann y Strack (2000), en el que los sentimientos son transmitidos automáticamente de una persona a otra. La comunicación no verbal: los canales básicos Los canales básicos son los medios a través de los que se da la comunicación no verbal, y son los siguientes: 1. Las expresiones faciales. Las emociones y sentimientos humanos se reflejan, con frecuencia, en la cara y pueden ser leídos a través de expresiones específicas, siendo posible aprender de los estados anímicos y de los sentimientos de otros a raíz de sus expresiones faciales. De hecho, en el rostro humano se muestran, de forma temprana y clara, seis emociones básicas diferentes: ● Rabia ● Miedo ● Alegría ● Tristeza ● Sorpresa ● Disgusto ● (y puede que también el desprecio, según estudios posteriores) Aún así, hay que tener en cuenta que las emociones pueden surgir de manera combinada, variando en intensidad, por lo que aunque sean seis las emociones básicas, son muchas las variaciones. 1 Atribución: para comprender las causas del comportamiento de los otros La atribución es el proceso mediante el cual nosotros no sólo queremos conocer cómo han actuado los otros, sino que también queremos comprender el por qué. Así, la atribución se refiere a nuestros esfuerzos por comprender las causas que hay detrás del comportamiento de los otros y, en algunas ocasiones, detrás del nuestro. Teorías de la atribución: marcos para entender cómo intentamos darle sentido al mundo social A lo largo del tiempo se han desarrollado varias teorías para explicar la atribución, nosotros nos centraremos en dos particularmente influyentes. 1. La Teoría de la Inferencia Correspondiente (Jones y Davis, 1965) trata sobre cómo decidimos, basándonos en la observación del comportamiento de las personas, que ellas poseen unos rasgos específicos o disposiciones que permanecerán claramente estables en el tiempo. Esta parece ser una tarea fácil, pero lo cierto es que el comportamiento de una persona puede estar condicionada por factores externos. Ej.: que una mujer corra por un aeropuerto a prisa y empujando a la gente no tiene que implicar que sea bruta e impaciente, puede ser tímida y educada pero puede estar perdiendo un vuelo. Para hacer frente a estas complicaciones, según Jones y Davis, echamos mano de ciertos tipos de acciones. ● Tomamos en cuenta los comportamientos que parecen haber sido escogidos libremente y no los que parecen haber sido forzados. ● Prestamos especial atención a los efectos no comunes, es decir, los que pueden ser causados por un factor específico pero no por otros. Con esto, podemos saber mucho más a través de las acciones que producen efectos no comunes, que de las que no lo hacen. ● Prestamos mayor atención a las acciones que son bajas en deseabilidad social que a las que son altas en esta dimensión, es decir, sabemos más de los rasgos de una persona gracias a las acciones que están fuera de lo ordinario que por las que son vistas como agradables por la mayoría de la gente. En definitiva, concluimos con que el comportamiento refleja rasgos estables siempre que su comportamiento… ● esté escogido libremente ● se base en efectos distintivos y no comunes ● sea bajo en deseabilidad social. 2. La Teoría de las Atribuciones Causales de Kelley. La tarea central de la atribución es saber el por qué la gente ha actuado de una forma o por qué los eventos han tenido un giro de una manera específica. Este conocimiento es crucial, pues sólo si entendemos las causas que hay detrás de las acciones de otros o de los eventos que ocurren podremos darle sentido al mundo social. Así, surge una pregunta: 4 El comportamiento de otros, ¿proviene de causas internas (sus propios rasgos, motivos, intenciones), de causas principalmente externas (algún aspecto del mundo físico o social) o de una combinación de las dos? Para conocer el <<porqué>> del comportamiento de otros, nos centramos en información relacionada con tres fuentes principales: 1. El consenso. La medida en que otras personas reaccionan ante algunos estímulos de la misma manera en que reacciona la persona que estamos considerando. Mientras mayor sea el nº de personas que reaccionen de la misma forma, mayor será el consenso. 2. La consistencia. La medida en que un individuo responde, de la misma manera, ante un estímulo o situación dada en diferentes ocasiones, a lo largo del tiempo. 3. La distintividad. La medida en que la persona responde de la misma manera ante diferentes estímulos o eventos. Así… ● Por una parte atribuímos el comportamiento de la persona a causas internas cuando... ○ El consenso y la distintividad son bajos ○ La consistencia es alta ● Por otro lado, atribuímos al comportamiento de una persona causas externas cuando... ○ Consenso, consistencia y distintividad son altas. ● Por último, atribuímos una combinación de valores internos y externos cuando ... ○ El consenso es bajo ○ La consistencia y la distintividad son altas Pondremos el ejemplo en el que un camarero liga con una clienta y veremos si se debe a causas internas o externas. 5 Otras dimensiones de la atribución causal. Además de las dimensiones internas-externas, también surgen dos preguntas que no tienen nada que ver con estas. 1. Si los factores causales que influyen en el comportamiento son estables. Ej.: algunas causas internas, como el temperamento, suelen ser muy estables en el tiempo. 2. Si los factores causale pueden ser controlables. Ej.: algunas causas internas son controlables, como aprender a mantener el temperamento bajo control. Así, cuando intentamos entender las causas que hay detrás del comportamiento de otros tomamos en cuenta estas dimensiones y nuestro pensamiento sobre estas influye en nuestras conclusiones en relación a aspectos importantes (como si otros son personalmente responsables de sus propias acciones). Aumento y disminución: como manejamos múltiples causas potenciales. El principio de disminución es la tendencia a atribuir menos importancia a una causa potencial de algún comportamiento cuando otras causas potenciales están presentes. Esto ocurre de manera común y ejerce un fuerte impacto sobre las atribuciones en muchas situaciones, aún así, está lejos de ser universal. El principio de aumento es a tendencia a otorgar un peso o importancia adicional a un factor que puede facilitar un comportamiento dado cuando está presente también otro factor (inhibidor) y aún así el comportamiento tiene lugar. 6 Atribución: algunas fuentes básicas de error Los esfuerzos por comprender el comportamiento de las personas está sujetos a varios tipos de errores que pueden llevarnos a conclusiones falsas acerca de por qué se han comportado de una forma o de cómo se comportarán en un futuro. Entre estos errores tenemos… El sesgo de correspondencia: sobrevalorar el rol de las causas disposicionales El sesgo de correspondencia o error fundamental de atribución es la tendencia a explicar las acciones de otros como provenientes de sus disposiciones incluso ante la presencia de causas situacionales claras. Es decir, tendemos a percibir a otros actuando de la manera en que lo hacen debido al “tipo de persona” que son, más que como resultado de muchos factores externos que pueden influir en su comportamiento. Este error se suele dar en situaciones donde el consenso y la distintividad son bajos. Las posibles explicaciones del por qué de este sesgo son: ● Cuando observamos el comportamiento de otra persona, tendemos a centrarnos en sus acciones y, por tanto, las causas situacionales de su comportamiento pasan a un segundo plano. ● Notamos tales causas situacionales pero les damos poco peso en nuestras atribuciones. ● Cuando nos centramos en el comportamiento de otros, tendemos a comenzar asumiendo que sus acciones reflejan sus características subyacentes En cuanto a si este sesgo es universal o no, sabemos que la cultura juega un rol importante, pues suele ser más fuerte e culturas que enfatizan la libertad individual (culturas individualistas, como EEUU y Europa occidental). 9 El efecto actor-observador: “Tú caíste, a mí me empujaron” El efecto actor-observador es la tendencia a atribuir nuestro propio comportamiento principalmente a causas situacionales (externas), mientras que el comportamiento de otros se tiene a atribuir a causas disposicionales (internas). Esto ocurre debido a que somos bastante conscientes de los muchos factores externos que están afectando nuestras propias acciones, pero somos menos conscientes de tales factores a la hora de entender las acciones de otras personas. El sesgo de autobeneficio: “Yo soy bueno; tú tienes suerte” El sesgo de autobeneficio es la tendencia que tenemos a atribuir resultados positivos a causas internas (rasgos, características propias…) y resultados o eventos negativos a causas externas (dificultad de la tarea, oportunidad…). En cuanto al por qué de este sesgo, nos encontramos con dos columnas de explicaciones: 1. Explicaciones cognitivas: el sesgo sucede porque esperamos ser exitosos y tenemos una tendencia a atribuir los resultados esperados a las causas internas más que a las externas. 2. Explicaciones motivacionales: el sesgo surge de la necesidad de proteger y realzar nuestra autoestima o por el deseo relacionado de vernos bien ante los otros. El sesgo de autobeneficio, además, es la causa de muchas fricciones interpersonales, puesto que al trabajar con más gente en una misma tarea, las personas suelen pensar que han realizado las mayores contribuciones. Su fuerza, es distinta según la cultura; como en Asia, que es más débil debido a que hay un mayor énfasis en los resultados grupales y en la armonía del grupo. Aún así, a pesar de todos estos errores, debemos concluír con que la percepción social puede ser bastante atinada, es decir, en muchos casos elaboramos conclusiones adecuadas sobre los rasgos y motivos de los otros a partir de la observación de su comportamiento. 10 Aplicaciones de la teoría de la atribución: aproximaciones e intervenciones Atribución y depresión La depresión es el desorden psicológico más común, pues casi la mitad de los seres humanos la han experimentado alguna vez en su vida. Es un patrón de atribuciones contraproducentes que podemos destacar el que juega un rol importante en la depresión. En este, las personas atribuyen los resultados negativos a causas internas estables como propios rasgos o la falta de habilidad y atribuyen los resultados positivos a causas externas temporales, como la buena suerte. Como resultado, muy pocos deprimidos perciben que tienen algún control sobre lo que les sucede. Es por eso que han surgido terapias muy efectivas que se dedican a cambiar tales atribuciones aunque no exploren deseos reprimidos, conflictos internos o eventos traumáticos. Atribución y prejuicio En muchas situaciones, es difícil conocer si los resultados negativos experimentados por personas minoritarias son el resultado del prejuicio o de otros factores. Debido a esta incerteza, cuando tales personas atribuyen estos resultados al prejuicio, algunos espectadores concluyen que estas personas están equivocadas y, por tanto, piensan menos positivamente de ellas. El hecho de que esto pase tiene implicaciones inquietantes, pues puede llevar a las personas minoritarias a no desafiar la discriminación por miedo a ser vistas como personas que se quejan crónicamente. 11 Manejo de impresiones: el fino arte de parecer bueno El manejo de impresiones o autopresentación es el conjunto de esfuerzos de los individuos para generar primeras impresiones favorables en los otros. Tácticas de manejo de impresiones y su uso relativo Los individuos emplean diferentes tácticas para promocionar su imagen, pero la mayoría corresponden a dos categorías principales: 1. La automejora: esfuerzos para incrementar su atractivo frente a otros (mejorar la apariencia física a través del estilo de forma de vestir, el acicalado personal y el uso de accesorios personales… o describirse a sí mismo en términos positivos). Esta táctica es empleada en muchas ocasiones para incrementar su atractivo frente a una posible pareja. En definitiva, manipulan la verdad para mejorar su propio atractivo. 2. La mejora de otros: esfuerzos para hacer que la persona objetivo se sienta bien de diversas maneras induciendo atmósferas y reacciones positivas en esta, como la adulación (hacer afirmaciones que halaguen a la persona objetivo, sus atributos o logros, o a la organización con la que la persona en cuestión está asociada). Otros métodos adicionales son expresar acuerdo con las visiones de la persona objetivo, mostrar un elevado grado de interés en lo que dice, expresar simpatía hacia lo que dice… El manejo de impresiones: el papel de la carga cognitiva En algunas situaciones en las que intentamos causar una buena primera impresión, estas son muy demandantes en el sentido en el que tenemos que prestar atención a cosas que están sucediendo simultáneamente, por lo que no podemos concentrarnos plenamente en dar una buena impresión. 14 Estas representaciones suponen un gran esfuerzo cognitivo, por lo solemos dejar la tarea del manejo de impresiones en un segundo plano y, como resultado, se hace un trabajo menos efectivo en la presentación de uno mismo. Finalmente, podemos decir que este tipo de actuación es propio de gente introvertida, para los que la distracción cognitiva es un plus, puesto que les ayuda a hacer mejor el trabajo de autorepresentación. La precisión de la percepción social: evidencia de que es mayor de lo que piensas Aunque exista cierta complejidad en cuanto a la percepción, siempre solemos tener éxito en esta tarea, incluso cuando tenemos poca información y llegamos a saber si esta es cierta si las primeras impresiones se corresponden con las evaluaciones de las mismas personas, realizadas por personas que las conocen muy bien (miembros de la familia, parejas o buenos amigos). TEMA 4: ACTITUDES. EVALUAR EL MUNDO SOCIAL Los psicólogos sociales emplean generalmente el término actitudes para referirse a nuestras evaluaciones de cualquier aspecto del mundo social en que tengamos reacciones favorables o desfavorables hacia temas, ideas, personas, grupos sociales, objetos… y a menudo estas actitudes son ambivalentes. Las actitudes ambivalentes son aquellas que se basan en la tendencia a tener evaluaciones positivas y negativas sobre un mismo objeto actitudinal; por tanto, nuestra actitud hacia él resulta ambivalente, tenemos una mezcla de opiniones negativas y positivas sobre este. 15 Una vez las actitudes están formadas, son muy difíciles de cambiar. Pero los psicólogos sociales no las consideran importantes por esto, si no por las siguientes razones: ● Primero, las actitudes influyen fuertemente sobre nuestro pensamiento social incluso si no siempre son reflejadas en nuestro comportamiento. ● Segundo, porque ven que afectan frecuentemente a nuestro comportamiento. Si las actitudes afectan a nuestro comportamiento, conocer algo sobre la gente nos ayuda a predecir el comportamiento de ellas en diferentes contextos. FORMACIÓN DE ACTITUDES: ¿CÓMO Y POR QUÉ SE DESARROLLAN LAS ACTITUDES? Aprendizaje social: adquirir las actitudes a partir de los demás El aprendizaje social es el proceso mediante el cual adquirimos nueva información, formas de comportarnos o actitudes hacia otras personas. Este aprendizaje sucede a través de varios procesos. Condicionamiento clásico: aprendizaje basado en la asociación. El condicionamiento clásico es una forma básica de aprendizaje en la cual un estímulo, inicialmente neutral, adquiere la capacidad de evocar reacciones a través de la asociación repetida con otro estímulo. Es decir, que un estímulo (el primero) se vuelve una señal para la presentación de otro (el segundo). En otras palabras, cuando el primer estímulo aparece, los individuos esperan la aparición del segundo, el cual le seguirá pronto. Por ejemplo, si tu despertador se compone por un pitido al principio seguido de una canción, una vez asociado dicho sonido, te despertarás con el primer estímulo sabiendo que seguidamente va a empezar a sonar la canción. El condicionamiento clásico tiene que ver con la formación de las actitudes porque puede influir sobre ellas en la vida real. 16 experimentar principalmente emociones positivas o negativas, y estas tendencias pueden influir sobre las evaluaciones de muchos aspectos del mundo social. Por ejemplo, un hombre que tiende que estar de buen humor, tiene a expresar un alto nivel de satisfacción laboral independientemente de cuál sea su trabajo. Funciones de la actitud: ¿por qué nos formamos nuestras actitudes en el primer momento? Poseemos muchas actitudes y se puede afirmar que casi nunca somos neutrales hacia algún aspecto del mundo que nos rodea. Las actitudes pueden ser vistas como reacciones casi automáticas hacia el mundo que nos rodea y según investigaciones, que emplean técnicas sofisticadas para observar la actividad en el cerebro humano, sugieren que parece que clasificamos como positivos o negativos los estímulos que nos encontramos casi de manera inmediata. Las actitudes parecen operar como esquemas, que son marcos mentales que nos ayudan a interpretar y procesar muchos tipos de información, matizan nuestras percepciones y pensamientos acerca de temas, personas… 19 Las investigaciones indican que vemos como más convincente y adecuada la información que ofrece soporte a nuestras actitudes que la información que las refuta, sin embargo, recordamos mejor la información que refuta nuestras actitudes y percibimos a las fuentes que proporcionan evidencia contraria a nuestros puntos de vista como dudosas. Así vemos que las actitudes tienen una función cognitiva, pues son útiles para organizar e interpretar la información personal dándole sentido a nuestro mundo social (aunque nos pueda conducir por el mal camino). Además, las actitudes también juegan otros roles como son: ● Función de autoexpresión o autoidentidad que nos permite expresar nuestros valores centrales o creencias. ● Función de autoestima, que nos ayudan a mantener nuestros sentimientos de confianza hacia nosotros mismos. Por ejemplo, mucha gente tiene tendencia a creer que sus actitudes son las correctas, es decir las que la gente inteligente y culta debería tener, esto ayuda a sentirse superiores a los demás. ● Función de autodefensa, que ayuda a la gente a protegerse de información no deseada acerca de ellos mismo. Por ejemplo, personas de mente estrecha expresan que están en contra de la discriminación y esto les permite protegerse de verse a sí mismos como individuos altamente discriminatorios, que es lo que son. ● Función de motivación, para causar buena impresión. Todos deseamos causar una buena impresión en otros y una manera de hacerlo es expresar el punto de vista correcto. En definitiva, nuestras actitudes cumplen muchas funciones para nosotros y estas funciones a su vez pueden moldear de manera importante el impacto de las influencias que ejercen sobre el procesamiento de la información personal. La relación entre actitud y comportamiento: ¿Cuándo y cómo influyen las actitudes sobre el comportamiento? Probablemente, todos hayamos experimentado una diferencia entre tus propias actitudes y tu conducta, por ejemplo, si un amigo se ha comprado algo nuevo y te pregunta que te parece, aunque a ti no te guste, probablemente no lo digas por evitar herir sus sentimientos, por lo que podemos deducir que a menudo existe una gran distancia entre las actitudes y la conducta, entre lo que la gente dice y lo que realmente hace. Sin embargo, nuestras actitudes a menudo ejercen importantes efectos sobre nuestra conducta, ya que tus reacciones hacia la gente o temas moldean tus acciones referentes a estos aspectos. Por ejemplo, si tienes ideales conservadores, es probable que en las 20 elecciones votes a un partido conservador. De esta forma vemos que bajo ciertas condiciones las actitudes influyen de hecho sobre el comportamiento y cabe destacar además, el factor de la ambivalencia, pues las actitudes ambivalentes son un predictor más débil de la conducta real que las actitudes no ambivalentes. ¿Cuándo y cómo las actitudes influyen sobre el comportamiento? Especificidad, fuerza, accesibilidad y otros factores Los factores que determinan la medida en que las actitudes influyen sobre la conducta: Aspectos de la situación: factores que nos dificultan expresar nuestras actitudes Las restricciones situacionales son aquellas que moderan la relación entre actitudes y conductas, es decir, impiden que las actitudes sean expresadas en una conducta explícita. Por ejemplo, en una comida con amigos, te traen tu comida fría pero no te quejas, ya que eso sería colocar una nota negativa en una situación agradable. Los factores situacionales pueden influir en la relación entre actitudes y conducta de otra forma más a tener en cuenta. Por ejemplo, en una concentración contra la discriminación positiva es evidente que en su mayoría acudirá gente que se opone a medidas de discriminación positiva, con esto se quiere decir que tendemos a preferir situaciones que nos permitan expresar nuestras actitudes con nuestro comportamiento. A menudo, escogemos participar en situaciones las cuales lo que decimos y lo que hacemos coincide. Aspectos propios de las actitudes La relación entre actitudes y conducta está fuertemente determinada por varios aspectos propios de las actitudes, por ejemplo, en un parque querían talar árboles gigantes y viejos y mucha gente se opuso, poniéndose alrededor del árbol para impedirlo. Y así, lo consiguieron. Aquí se muestra, que tuvieron actitudes que afectaron fuertemente a su conducta. La relación entre actitudes y conducta está fuertemente determinada por varios aspectos, entre los que destacaremos: ● Orígenes de las actitudes: tiene que ver con cómo las actitudes son formadas en el primer momento. Las actitudes formadas a través de la experiencia directa a menudo ejercen mayores efectos en la conducta que 21 ACTITUDES Y REACCIONES INMEDIATAS DE COMPORTAMIENTO En situaciones que debemos actuar rápidamente, las actitudes parecen influir sobre la conducta de una manera más directa y automática. De acuerdo con la Teoría del Modelo del Proceso “de-la-actitud-a-la-conducta”; el proceso transcurre más o menos de la siguiente manera: algún evento activa una actitud; la actitud, una vez activada, influye sobre nuestras percepciones del objeto de la actitud. Al mismo tiempo, nuestro conocimiento sobre lo que es apropiado en una situación dada es también activado.Juntos, la actitud y la información previamente almacenada acerca de lo que es apropiado, moldean una definición del evento, y a su vez, esta percepción influye sobre la conducta. Por ejemplo, cuando alguien se cuela en una fila para pagar en una tienda. Estos eventos activan nuestras actitudes y nuestra comprensión de cómo se espera que se comporte la gente ante esta situación. Estos factores juntos influyen nuestra definición (percepción) del evento y a su vez, determina como nos comportamos. El fino arte de la persuasión: emplear mensajes para cambiar actitudes Persuasión: el enfoque tradicional La persuasión es el esfuerzo para cambiar las actitudes de los otros a través del uso de diferentes tipos de mensajes. Los esfuerzos de persuasión consisten en los siguientes elementos: alguna fuente emite algún tipo de mensaje (la comunicación) a alguna persona o grupo de personas (la audiencia). La investigación se centro en estos elementos claves preguntando “¿Quién dice 24 qué a quién con qué efecto?”. Este enfoque produjo muchos resultados, que son los siguientes: ● Comunicadores que son creíbles, es decir, que parecen conocer de lo que están hablando, son más persuasivos que los no expertos. ● Comunicadores que son atractivos de alguna manera son más persuasivos que los comunicadores que tienen un bajo atractivo y habilidad. Es una de las razones por las cuales los anuncios de publicidad se realizan con modelos atractivos. ● Los mensajes que no parecen estar diseñados para cambiar nuestras actitudes son más efectivos en este sentido que aquellos que parecen intentar alcanzar su meta. ● La gente es más susceptible a la persuasión cuando es distraída por algunos eventos externos que cuando está prestando mucha atención a lo que se está diciendo. ● Cuando una audiencia tiene actitudes contrarias a las del persuasor, a menudo resulta más efectivo para el comunicador adoptar un enfoque bilateral, en el cual ambos lados del argumento son presentados, más que adoptar un enfoque unilateral. ● Las personas que hablan rápido son a menudo más persuasivas que las que hablan más lento. ● La persuasión puede ser incrementada por mensajes que activen fuertes emociones en la audiencia (especialmente el miedo), cuando la comunicación proporciona recomendaciones específicas sobre cómo prevenir o evitar los eventos que producen miedo. El enfoque cognitivo de la persuasión: procesamiento sistemático versus procesamiento heurístico Podemos procesar los mensajes persuasivos de dos modos diferentes: ● Procesamiento sistemático o ruta central, implica una consideración cuidadosa del contenido del mensaje y de las ideas que este contiene. Es bastante trabajoso y absorbe mucha de nuestra capacidad de procesamiento e información. ● Procesamiento heurístico, o ruta periférica, implica el uso de reglas simples de atajos mentales, como la creencia de que “se puede confiar en las afirmaciones de los expertos”. Este tipo de procesamiento es mucho menos laborioso y nos permite reaccionar a mensajes persuasivos de una manera automática. 25 Las teorías modernas sobre persuasión, como el modelo de la probabilidad de la elaboración (es una teoría que sugiere que la persuasión puede suceder de dos maneras distintas que difieren en la cantidad de esfuerzo cognitivo o de la elaboración que requiere) proporcionan la siguiente respuesta: 1. Nos implicamos en un tipo de procesamiento laborioso cuando nuestra capacidad para procesar la información relativa al mensaje es alta o cuando estamos motivados para hacerlo. 2. Nos implicamos en un tipo de procesamiento menos laborioso cuando carecemos de la capacidad para procesar más cuidadosamente o cuando nuestra motivación para realizar dicho trabajo cognitivo es baja, es decir, el tema no es importante para nosotros. La existencia de estos dos modos de pensamiento nos ayuda a solucionar muchos enigmas. Por eso, se ha encontrado que cuando los mensajes persuasivos no son interesantes o relevantes para los individuos, la cantidad de persuasión que producen no está influída fuertemente por la fuerza de los argumentos que contienen. Cuando tales mensajes relevantes para los individuos son mucho más exitosos en inducir la persuasión si los argumentos que contienen son fuertes y convincentes. Esto se debe a que cuando la relevancia es baja, los individuos tienden a procesar los mensajes a través del modo heurístico (por medio de atajos mentales) y cuando la relevancia es alta, procesan los mensajes persuasivos más sistemáticamente y de esta manera, la fuerza del argumento resulta importante. La distinción entre sistemático y heurístico ayuda a explicar por qué es más fácil persuadir a las personas cuando están distraídas (es decir, pedirles que hagan dos cosas al mismo tiempo), ya que la capacidad de procesamiento de información ante un mensaje persuasivo se encuentra limitada; por tanto, la gente adopta un modo heurístico de pensamiento. 26 ● Asimilación sesgada y polarización de la actitud: “si es contrario a lo que yo pienso, no es de fiar” Además, hay dos procesos adicionales que juegan un rol en nuestra habilidad para resistir los intentos de persuasión. Estos son: ● Asimilación sesgada, que es una tendencia a considerar menos convincente o confiable la información que contradice nuestros puntos de vista, que la que las confirma. ● Polarización de la actitud, que es la tendencia a evaluar la evidencia o información mixta de tal manera que fortalezca nuestras posturas iniciales, volviéndolas más extremas. Como resultado de estos dos procesos, nuestras actitudes parecen realmente estar lejos de ser alcanzadas por los múltiples intentos de cambiarlas y tienden a persistir incluso cuando somos confrontados con nueva información que las reta fuertemente. 29 DOSSIER: VALORES Los valores son determinantes cognitivos del comportamiento además de un complemento esencial para estudiar las actitudes. Dentro del estudio de los valores cabe destacar dos autores de referencia: Rockeach y Swartz. Rockeach como referencia Para rockeach, los valores se definen como una creencia duradera de un modo específico de conducta o estado último de existencia que es personal y socialmente preferible a su opuesto o inverso. La creencia es una opinión acerca de algo que puede ser objeto de actitud, concretamente al componente cognitivo (información, conocimiento, pensamientos…). Esta es una expresión verbal de la actitud, una convicción subjetiva, sin fundamentación objetiva y sin pretensión de darla. Así, nos encontramos con distintos tipos de creencias: ● Descriptivas o existenciales: las que provienen de la observación directa y sobretodo, de la experiencia, del contracto personal con los objetos. Se mantienen con un alto grado de certeza al ser validadas continuamente por la experiencia y suelen tener un peso importante en las actitudes de los individuos. Ej.: cuando se le dice a un persona con obesidad “hacer ejercicio es saludable”. ● Evaluativas o inferenciales: las que tienen su origen en relaciones previamente aprendidas o en el uso de sistemas formales de codificación; en cualquier caso, la base de esta creencia es siempre algún tipo de creencia descriptiva. Está formada de dos posibles fuentes: ○ Razonamiento silogístico, que es una consistencia probabilística. ○ La basada en la noción de atribución causal. Ej.: Cuando una persona con obesidad dice “si me alimento sanamente y hago ejercicio, perderé peso.” ● Prescriptivas, proscriptivas o informativas (valores): provienen de informaciones que proceden del exterior: otras personas, medios de comunicación social, etc. Muchas veces pueden dar lugar a creencias descriptivas. Ej.: Cuando una persona con obesidad piensa “Si compro el producto que vende Maribel Guardia bajaré de peso.” Valores La principal característica de los valores es la estabilidad debido a la presión social, al hecho de que posibilita la conciencia de la propia identidad y a que son enseñados de forma aislada y absoluta. 30 Clasificación de los valores ● Instrumentales: son un grupo de valores que utilizamos día a día que nos ayudan a llegar a los valores finales. Para esto necesitamos valores como la justicia, respetar a la gente con la que trabajamos, comer sano, etc. ● Finales: los objetivos que tenemos en la vida. Son valores que para nosotros implican muchas cosas aunque no pensemos en ellos en el día a día. Ej.: Todos queremos tener una larga y sana vida. Así, vemos que un valor final implica muchas cosas, como el sistema de salud o el de dormir. Funciones de los valores ● Vía de acción, toma de decisiones y resolución de conflictos. ● Expresión de necesidades humanas: la perspectiva motivadora de la psicología social. La perspectiva motivadora ● Función adaptativa o utilitaria (educación, autocontrol, comfort…) ● Obedece a la presión social (comparación, aceptación…) ● Egodefensiva: las necesidades inaceptables deben convertirse en aceptables a través de los procesos de racionalización y formación reactiva (anular o cambiar una idea o sentimiento inaceptable por su antítesis) ● Función de conocimiento: necesidad de las personas de dotarse de una organización cognitiva buena, clara y consistente. Valores, actitudes y comportamiento VALORES ACTITUDES Creencia única Referidas a la organización de varias creencias Van más allá de los objetos y situaciones concretas Están focalizadas sobre algo específico Tienden a transformarse en norma de comportamiento NO Posee cierto carácter de deseabilidad Posee cierto carácter de encuentro directo con algo Ocupan un lugar más central en la estructura cognitiva del sujeto Es periférica Tienen funciones más diferenciales Tienen funciones menos diferenciales La capacidad predictiva del valor sobre la conducta Un valor Puede predecir varios comportamientos Una conducta específica puede predecir algunos valores 31 información relativa al prejuicio recibe mayor atención o es procesada de forma más cuidadosa que la información que no se refiere a aquél.Lo mismo ocurre con información consistente con la perspectiva prejuiciosa de los individuos,que al recibir una atención mayor es recordada con mayor detalle que la información no consistente con ella.Como resultado de estos efectos, el prejuicio se convierte en una especie de circuito cognitivo cerrado que tiende a aumentar su fuerza con el paso del tiempo. ● En segundo lugar,en tanto actitud, el prejuicio incluye sentimientos o emociones negativas que se activan en las personas prejuiciadas cuando estas se ven expuestas o simplemente piensan en miembros de los grupos que les desagradan. Además, el prejuicio puede ser implícito, es decir, puede desencadenarse de forma prácticamente automática, ante la exposición a miembros de grupos hacia los que se dirige, e influir en el comportamiento aún cuando las personas con dicho prejuicio no sean conscientes de él o incluso nieguen su existencia. Prejuicio:por qué persiste Podemos explicar por qué tantas personas generan y sostienen prejuicios por dos vías. 1. Los individuos tienen prejuicios porque estos permiten reforzar su autoimagen. Cuando un individuo con prejuicios carga contra un grupo del que tiene visión negativa,afirma su autoconfianza, además se sentirá superior en varios aspectos. 2. Se ahorra un considerable esfuerzo cognitivo y son los estereotipos los que parecen cumplir esta función, pues una vez que se forman no es necesario detenerse en un procesamiento de la información cuidadoso y sistemático, sino que se confía en un tipo de procesamiento heurístico de creencias preconcebidas. Discriminación:prejuicio en acción Al igual que con las actitudes, en muchos casos quienes mantienen actitudes negativas hacia miembros de algunos grupos no manifiestan su prejuicio de forma directa. Leyes, presión social y miedo a represalias sirven para disuadir a las personas a que lleven sus visiones prejuiciadas a la práctica de manera explícita. Por esta razón en muchos países 34 como EEUU, han disminuido manifestaciones evidentes de discriminación (sentarse en lugares específicos del autobús,mezclarse con los demás en escuelas, restaurantes...), siendo la discriminación un conjunto de comportamientos negativos hacia miembros de grupos sociales que son objeto de prejuicio. Sin embargo, esto no implica que las expresiones extremas del prejuicio se hayan extinguido en su totalidad, pues han aumentado los crímenes por odio; aunque son hechos relativamente raros y, en general el prejuicio se expresa a través de formas de comportamiento más sutiles. Estas formas de discriminación disimuladas y sutiles son: Racismo moderno: más sútil, igual de contundente. Antes no se tenía reparo alguno en expresar de forma abierta creencias racistas (Racismo "antiguo" es decir explícito"). Pero actualmente muy pocas personas manifiestan de forma abierta este tipo de pensamientos. Esto no significa que el racismo haya desaparecido o disminuido, por lo que muchos psicólogos sociales hablan de racismo moderno, esto es disimular el prejuicio hacia los demás en circunstancias públicas y expresar actitudes intolerantes cuando se está a salvo de cualquier sanción, como delante de amigos y familiares que comparten estas actitudes. Además suele aparecer una intolerancia asociada a fuentes distintas al prejuicio,aunque aquella provenga de éste. Ej. Individuo que sostiene una opinión contraria al matrimonio interracial debido a las dificultades que pueden sufrir los niños provenientes de esta unión cuando en realidad esta visión deriva de un prejuicio y la creencia sobre la inferioridad asociada a miembros de grupos cuya raza o etnia son distinta a las de quien sostiene esta creencia. Como la mayoría de las personas suelen ocultar el racismo moderno (y otras formas de prejuicio), los psicólogos sociales han desarrollado maneras no entrometidas para estudiar dichas actitudes. La medición de actitudes racistas implícitas La manera más directa de medir el prejuicio es estimulado a la persona para que manifiesten su visión sobre grupos de distinta raza, etnia o género, pero pocas personas están dispuestas a admitir abiertamente su prejuicio, y mucho menos ante extraños. En el s. XXI surgió una maquina a la que llamaron Bogus pipeline, que supuestamente medía los prejuicios de las personas a través de ondas cerebrales o músculos. Así, cuando a una persona se le conectaba a la máquina esta no se esforzaba en ocultar sus prejuicios, pues la maquina los “descubriría”. De esta forma, sus respuestas serían bastante fiables y ofrecerían una visión bastante precisa de sus actitudes, aunque para eso las personas sometidas al experimento no deberían dudar de la veracidad de la máquina, pues al final, estaban expuestos al engaño. Con este dispositivo solo se puede medir actitudes explícitas, es decir, aquellas que las personas son conscientes y pueden comunicar si así lo desean. Los psicólogos sociales han reconocido que varias de las actitudes que tienen las personas son actitudes implícitas, esto es, que existen e influyen en varias formas de comportamiento,pero quienes las poseen pueden no estar conscientes de su existencia e incluso negar el hecho de tenerlas. Así, nos podemos encontrar con varios métodos para medir estas formas sutiles de prejuicio, la mayoría se basan en el priming, que se refiere a que la exposición a ciertos estímulos o eventos activa la disponibilidad de esa información mantenida en la memoria, haciéndola más fácil de recordar o más disponible para influir en nuestras reacciones. Un ejemplo es el uso de un dispositivo llamado bona fide pipeline, que hacía uso del priming para detectar actitudes racistas. Los hallazgos de investigaciones señalan que las personas si que poseen actitudes racistas 35 implícitas que son activadas automáticamente por miembros de grupos étnicos o raciales,y esas actitudes automáticamente activadas, a la vez, pueden influir en aspectos importantes del comportamiento,tales como la toma de decisiones que afectan a otros o lo amigables que seamos con ellos. Emblematismo (Tokenism): bajos beneficios, elevados costes El emblematismo implica llevar a cabo acciones positivas triviales dirigidas a personas blanco de prejuicios, lo que sirve de excusa o justificación frente a modalidades de discriminación posteriores. Así, dentro de esta otra modalidad de racismo moderno podemos destacar dos aspectos negativos: 1. Deja libre de sospechas a las personas prejuiciadas, ya que las acciones relacionadas con el emblematismo sirven como prueba en contra del racismo. 2. Pueden producir daños en la autoestima y la confianza de las víctimas del prejuicio, por ser contratadas o recibir una ayuda por pertenecer a un grupo étnico, por su género u otra y no por sus capacidades. Destacamos también que hay estudios que revelan que las personas contratadas por contruir un ejemplo o emblema son percibidas de forma más bien negativa por los demás miembros de la organización. En definitiva, el emblematismo es una forma sutil de discriminación que ha de evitarse. Orígenes del prejuicio:diferentes perspectivas En este apartado trataremos los orígenes del prejuicio, es decir, las condiciones sociales de las cuales deriva. Conflicto intergrupal directo: la competición como fuente del prejuicio Según la explicación más antigua del prejuicio, la Teoría del conflicto realista, el prejuicio deriva de la competencia directa entre varios grupos sociales por los recursos escasos y valiosos (empleos importantes,buenas casas,estatus elevado..), estos pueden empezar a ver al contrario en términos cada vez más negativos. El resultado de esto puede ser el desarrollo de un prejuicio con fuerte carga emocional en toda su expresión. La existencia de este proceso ha sido confirmada en diferentes estudios, además este proceso en muchos casos conduce a conflictos directos y muchas veces violentos. (Demostración Sherif y sus colegas pág.224). 36 Fuentes cognitivas del prejuicio:estereotipos explícitos e implícitos. Los estereotipos son creencias referidas a características o rasgos compartidos por miembros por miembros de grupos sociales específicos. Estos son marcos cognitivos con fuerte influencia en el procesamiento de la información social que recibimos. Estereotipos: qué son y cómo operan Los estereotipos sugieren que quienes pertenecen a un grupo poseen una serie de rasgos, al menos de cierto grado. Al activarse los estereotipos, este tipo de rasgos vienen rápidamente a tu mente, lo que explica la facilidad con la que construimos listas sobre los distintos grupos sociales. Tal como sucede con los distintos marcos cognitivos que existen, los estereotipos tienen una fuerte influencia en la manera que procesamos la información social, así, la información relevante para un estereotipo activo se procesa más rápido que la que no lo es. Cuando conocemos a una persona perteneciente a un grupo social sobre el que recaen una serie de estereotipos (información consistente) que no los sigue, esta información no hará que cambiemos de opinión respecto a dichos estereotipos, sino que cambiaremos la información en nuestras mentes (inferencias tácticas) o elaboraremos conclusiones con tal de encajar la información en el estereotipo (como caracterizando a esa persona como especial, una excepción. Esto es lo que llamamos rechazo de información inconsistente). Los psicólogos sociales Dunning y Sherman han calificado a los estereotipos de prisiones sociales: una vez que se forman, modelan nuestra percepción de las otras personas a tal punto que la nueva información se interpreta de manera que confirma los estereotipos, aún cuando no sea el caso. Estereotipos implícitos:cuando creencias que no reconocemos influyen en nuestro comportamiento Muchas veces tenemos estereotipos implícitos que no podemos identificar fácilmente, es decir que no somos conscientes de su existencia, pero esto no impide que influyan en nuestras creencias acerca de las características que suponemos que poseen los miembros de una categoría social en particular (raciales,étnicos, de género…). Estos pueden ser activados ante diversos estímulos, y una vez activados influyen en nuestros pensamientos, decisiones o comportamientos hacia quienes se refiere el prejuicio. 39 Otros mecanismos cognitivos en el prejuicio:correlaciones ilusorias y homogeneidad del exogrupo Los psicólogos sociales conocen como correlaciones ilusorias la tendencia a sobreestimar la proporción de comportamientos negativos en grupos relativamente pequeños. Este término otorga sentido al hecho de percibir relaciones entre variables que en realidad son inexistentes. Las correlaciones ilusorias tienen importantes implicaciones para el prejuicio, pues ayudan a explicar por qué los miembros de grupos mayoritarios atribuyen con frecuencia tendencias y comportamientos negativos a varios grupos minoritarios. Según éstas, los estereotipos se pueden formar incluso aunque no existan diferencias entre los grupos. Una vez que un grupo se asocia con determinado comportamiento, esta asociación pasará a formar parte de la representación que las personas tienen de ese grupo. Algunas veces las personas consideran que dos hechos están relacionados cuando en realidad no hay ninguna relación entre ellos. Normalmente lo que se produce es una asociación a los miembros de grupos minoritarios tendencias y comportamientos negativos. Diferenciación endogrupal, homogeneidad exogrupal:"¿Acaso ellos no son todos iguales?" Estas son el tipo de afirmaciones comunes en personas con fuertes prejuicios hacia un grupo social, e implican que los miembros de un exogrupo son considerados más semejantes entre sí que los del propio endogrupo. Esta tendencia es conocida como ilusión de la homogeneidad del exogrupo (tendencia a percibir como semejantes (menos variables) entre sí a los miembros del exogrupo, a diferencia de lo que ocurre con los 40 miembros del propio endogrupo). El proceso contrario de esta tendencia sería la diferenciación del endogrupo (tendencia a percibir como muy diferentes(más heterogéneos) entre sí a los miembros del propio grupo, a diferencia de lo que ocurre con miembros de otros grupos). Una explicación de esta homogeneidad del exogrupo puede ser que el endogrupo ha tenido un mayor número de experiencias con los miembros del propio grupo, lo que les hace estar expuestos a un mayor rango de variaciones individuales. Por contraposición, estos tienen una menor experiencia con miembros de otros grupos y, en consecuencia, una exposición más limitada a variaciones individuales. Esta tendencia, en definitiva, juega un papel muy importante en la creación y el mantenimiento de estereotipos negativos. La lucha contra los estereotipos hacia las personas obesas Las personas obesas son objeto de un fuerte prejuicio, conocido como prejuicio de la apariencia o prejuicio hacia personas que no son consideradas atractivas en sus respectivas sociedades. En la mayoría de los países occidentales (y especialmente en EEUU), estar delgado es lo que hace que las personas con sobrepeso no sean consideradas atractivas. El resultado de esto se expresa en muchos tipos de discriminación sutil, que en ocasiones derivan en manifestaciones explícitas (Ej.: solicitar personas delgadas como personal de vuelo constituye una discriminación abierta que ha sido declarada ilegal en los tribunales.) Como señala Berscheid(1996) estas personas son frecuentemente rechazadas en empleos en lo que la apariencia no tiene un papel preponderante, y el sobrepeso no impide el correcto desempeño del trabajo, dichas personas son consideradas poco atractivas, lo que daria "mala imagen" a la empresa. A pesar de que el atractivo de la delgadez no es algo universal. (En una tribu de Nigeria las niñas se someten a procesos de engorde y, en caso de no hacerlo, los padres serán juzgados por no poder permitírselo.) Personas de estas características han formado asociaciones para proteger sus derechos y combatir prejuicios: la Asociación Nacional para el Avance en la Aceptación de la Obesidad(NAAFA) insta a sus miembros para que escriban cartas, se impliquen en protestas, impulsen sanciones económicas y den discursos a promover legislación que proteja los derechos de las personas obesas. Otra organización, el Grupo de Trabajo en Pro del Activista Gordo(lucha discriminación de tallas). 41 Recategorización: desplazar la frontera entre "nosotros" y " ellos" El proceso de recategorización se basa en una serie de ambios en el límite entre el endogrupo de un individuo ("nosotros") y algún exogrupo ("ellos"). Como resultado de esta recategorización, las personas que en principio miembros del exogrupo pueden pasar a ser vistas como pertenecientes al endogrupo. La incógnita es que si mediante este proceso de recategorización podemos reducir los niveles de prejuicio. El modelo de la identidad endogrupal sugiere que en la medida en que personas que pertenecen a diferentes grupos se autoperciben como miembros de una entidad social única (es decir debilitar o eliminar los límites "nosotros-ellos"), incrementan los contactos positivo con los diferentes grupos, lo que reduce el prejuicio intergrupal. Para hacer esto posible, Gaertner y sus colegas sugieren que el trabajo cooperativo conjunto, ya que al trabajar por metas comunes, es más fácil que los miembros de distintos grupos se perciban como una entidad social única. Intervención cognitiva:¿Podemos decir simplemente "NO" a los estereotipos? La tendencia a pensar en los otros en función de su pertenencia a varios grupos o categorías (lo que se conoce como procesamiento orientado categóricamente) parece ser un factor clave en la existencia y persistencia de varias formas de prejuicios. Si esto es así, entonces las intervenciones diseñadas para reducir el impacto de los estereotipos pudieran ser altamente efectivas en la reducción del prejuicio y la discriminación. Técnicas para reducir el impacto de los estereotipos: ● Motivar a los otros a no ser prejuiciados, por ejemplo, al hacer conscientes normas igualitarias y estándares requeridos para que todos disfruten de los mismos derechos. ● Alentar a los individuos a que piensen detenidamente en los demás, concretamente al entender las características únicas de los otros antes que a la pertenencia a varios grupos. Esto puede lograrse motivando a los individuos a ser precisos y a tener recursos cognitivos suficientes para lograrlo. 44 ● Entrenamiento diseñado para disminuir la activación automática de los estereotipos, basándose en una técnica de decir "no" a los rasgos asociados con grupos específicos de forma estereotipada. La influencia social en la reducción del prejuicio. Puede decirse que los prejuicios y los estereotipos provienen, al menos en parte, de factores y experiencias sociales. Si esto es así, se podrían utilizar técnicas de influencia social para reducir ambos procesos. Por ejemplo, si un individuo aprenden que su visión de los demás está más sesgada que la de personas que les agradan, puede aparecer la motivación por cambiar dicha visión. Sabemos así, según estudios, que las actitudes de los individuos están no solo bajo la influencia de experiencias previas, sino también de información actual referida al estado de esta información en los otros.Por lo tanto el prejuicio puede llegar a reducirse si a quienes lo poseen se les induce a creer que su visión prejuiciada se demarca de la visión de los demás (sobretodo si son personas a quienes admira o respeta). Hacer frente al prejuicio: como reaccionan las víctimas. En este apartado trataremos los efectos que producen los prejuicios en las vícitimas de estos y cómo se enfrentan a ellos. El psicólogo afroamericano Kenneth Clark llevó a cabo una serie de estudios en los que a niños de raza blanca y negra se les daba la oportunidad de elegir entre muñecas blancas o negras.Muchos niños negros preferían jugar con muñecas blancas, esto se interpretó como un rechazo a la propia identidad racial y étnica en los niños pertenecientes a grupos minoritarios como consecuencia del prejuicio, y con posibles efectos perjudiciales como una autoestima más baja. Estos resultados no se confirmaron en estudios posteriores, en la actualidad muchos niños negros prefieren jugar con muñecas negras y no rechazan la propia identidad racial. de hecho, actualmente se tienen dudas de si las víctimas de prejuicio tienen presentes estos aspectos negativos. ´ Según Steele y Aronson (1995), las personas pertenecientes a grupos minoritarios experimentan la amenaza del estereotipo, es decir, una preocupación por ser evaluadas a partir de estos estereotipos, lo que se une al miedo de confirmarlos. Esto, además, puede afectar a la ejecución de diversas actividades. Es aquí cuando vemos la importancia de no solo centrarnos en las mentes en las que se encuentran los prejuicios, sino que también es crucial considerar como actúan las víctimas ante estas actitudes y estereotipos, y el trato negativo que deriva de ellos. Pues, al llegar a un conocimiento óptimo de ambos bandos, tal vez podamos contrarrestar los efectos de los prejuicios. 45 Prejuicios basados en el género:naturaleza y efectos A pesar de que más de la mitad de la población mundial la constituyen mujeres, estas suelen ser consideradas como un grupo minoritario. A raíz de esto, han estado excluidas de los ámbitos políticos y económicos, han sido objeto de fuertes estereotipos negativos y han sido discriminadas a lo largo de la historia. Nace así el sexismo, un prejuicio basado en el género. Los sexismos hostil y benevolente: las dos caras del prejuicio basado en el género Cuando decimos que una persona es prejuiciosa, normalmente se trata de que tiene visiones fuertemente negativas hacia un grupo. Pero esto no es siempre así, pues el prejuicio se puede manifestar de forma totalmente opuesta. Lo mismo ocurre en cuanto al sexismo, donde nos podemos encontar con las dos caras de la moneda: ● Sexismo hostil es una perspectiva según la cual la mujer, si no inferior al hombre, posee muchas características negativas (por ejemplo, buscan tratos especiales de favor, son sensibles de manera exagerada o intentan hacerse con el poder de los hombres aunque no lo merezca). ● Sexismo benevolente: perspectiva según la cual las mujeres merecen protección, son superiores a los hombres en varios aspectos (son más puras y tienen mejor gusto) y son realmente necesarias para la felicidad de los hombres (por ejemplo, ningún hombre está completamente realizado hasta que encuentra en su vida una mujer a quien adorar). El sexismo no necesariamente implica visiones negativas uniformes de las mujeres u hostilidad hacia ellas, el sexismo benevolente también constituye una forma de prejuicio, ya 46 sobre la competencia de las mujeres pero aumentar su atractivo. (¡Triste logro que las mujeres obtengan beneficios por expresar menor confianza en sí mismas!). ● Reacciones negativas ante la mujer como figura de autoridad: por una parte aunque los subordinados se expresan por igual respecto a hombres y mujeres en posiciones de liderazgo, suelen expresar comportamiento negativos más verbales hacia ellas. Por otra parte, las mujeres líderes tienden a recibir de sus subordinados evaluaciones más bajas que los hombres. Esto ocurre especialmente cuando las mujeres asumen un estilo de liderazgo considerado como típicamente masculino (autrocrático, directivo), en ámbitos en que los líderes en su mayoría son hombres y cuando son ellos quienes evalúan a sus líderes (desventajas tácitas de las mujeres a la hora de obtener posiciones de liderazgo y autoridad). Hallazgos reportados por Rudman y Kilianski(2000), señalan que tanto hombres como mujeres les prefieren a ellos en posiciones de autoridad, esto nos indica que ambos géneros, se sienten más comodos cuando los cargos más elevados son ocupados por hombres. ● Diferencias de género al escalar posiciones en la empresa: el "techo de cristal" y otros obstáculos: entre los años 70-90, la proporción de mujeres en puestos directivos se ha incrementado de un 16 hasta un 42%. Sin embargo, la proporción en los puestos de alta dirección sólo ha aumentado de un 3 a un 5%. Esto nos ha llevado a señalar la existencia del techo de cristal: barreras basadas en prejuicios actitudinales u organizacionales que impiden el avance de mujeres cualificadas hacia las posiciones de nivel más alto en una organización. Sobre su existencia, algunos estudios admiten que las mujeres obtienen logros inferiores a los de los hombres en razón de su género. Otros estudios han llegado a la conclusión de que mientras hombres y mujeres pueden alcanzar las mismas posiciones en la empresa, uos y otras emplean diferentes rutas para alcanzar sus propósitos, pues las mujeres se encuentran con mayores dificultades de camino al éxito. En definitiva, sí existe un techo de cristal, aunque ante este nos encontramos con una visión positiva, ya que poco a poco se va resquebrajando. 49 TEMA 9: INFLUENCIA SOCIAL: CAMBIAR EL COMPORTAMIENTO DE LOS OTROS En la vida cotidiana a menudo empleamos tácticas de la influencia social, que son técnicas diseñadas para cambiar las actitudes, percepciones y comportamientos de una o más personas. El tema de la influencia social es de gran importancia dentro de la psicología social, por lo que nos centraremos en distintos aspectos de esta: 1. Primero nos centraremos en la conformidad. Esta es un tipo de influencia social en la cual los individuos cambian sus actitudes o comportamiento para adherirse a las normas sociales existentes. 2. Después, nos centraremos en la condescendencia, que es una forma de influencia social que implica solicitudes directas de una persona a otra o también podemos definirla como una serie de esfuerzos para hacer que otros respondan de manera afirmativa a nuestras peticiones. 3. Por último, nos centraremos en dos extremos de la influencia social: a. La obediencia, una forma de influencia social en la cual una persona simplemente ordena a otra/s a realizar una acción. b. El adoctrinamiento intenso, los esfuerzos de los grupos extremistas para reclutar nuevos miembros e inducirlos a aceptar las creencias del grupo de una manera incuestionable. 50 La conformidad: la influencia del grupo en acción Existen reglas explícitas o tácitas que indican cómo deberíamos comportarnos, las cuales son conocidas como normas sociales, y con frecuencia ejercen efectos importantes sobre nuestro comportamiento. En algunas circunstancias, están formuladas y detalladas explícitamente, por ejemplo, los gobiernos funcionan generalmente a través de reglas escritas en las constituciones y las leyes. En contraste, otras normas se encuentran tácitas, ya que obedecemos reglas no escritas como “no te acerques mucho a los desconocidos”, así como que nos encontramos a menudo influidos por cambios rápidos en la manera de vestir, hablar o arreglarse. Independientemente de si son explícitas o implícitas, un factor claro es que la gente obedece la mayor parte del tiempo. Estas normas en concordancia con las expectativas de la sociedad sobre cómo deberíamos comportarnos, dan la imagen de ser algo censurable, ya que establece restricciones sobre la libertad, pero sin ella nos encontramos ante un caos social. Asch realizó una serie de experimentos sobre conformidad con resultados reveladores. La investigación de Asch sobre la conformidad: presión social, ¿una fuerza irresistible? La vida está llena de momentos en los cuales descubres que nuestros propios juicios, acciones o conclusiones son diferentes de los de otras personas. Los estudios realizados por Asch proporcionaron importantes revelaciones acerca de nuestros comportamientos e investigó los efectos de destruir la unanimidad del grupo. Los resultados de esta investigación sugieren que lo crucial es la unanimidad del grupo, una vez que se rompe, resistir la presión del grupo se vuelve más fácil. En los estudios posteriores es necesario mencionar que los hallazgos subrayan la importancia de distinguir entre: la conformidad pública, hacer o decir lo que otros a nuestro alrededor dicen que hagamos o digamos, y la conformidad privada, llegar a sentir o pensar como lo hacen otros. 51 Resistir las presiones hacia la conformidad: ¿Por qué a veces elegimos no seguir a los demás? En muchos casos, los individuos resisten las presiones hacia la conformidad, nosotros adoptamos la mayoría de las normas sociales, pero no completamente, y no todas ellas. Parecen ser importantes muchos factores para resistir hacia la conformidad, pero dos parecen sobresalir: la necesidad de mantener nuestra individualidad y la necesidad de mantener el control sobre nuestras vidas. La necesidad de mantener nuestra individualidad (necesidad de ser diferenciado de otros en algunos aspectos) parece ser uno de los factores más importantes, ya que queremos ser como los demás pero no hasta el punto de perder nuestra identidad personal. La tendencia hacia la conformidad será más baja en las culturas individualistas que en las culturas colectivistas. Un estudio comparó la conformidad diecisiete países diferentes. Los resultados indicaron que una mayor conformidad fue registrada en países con culturas colectivistas. Otra razón por la que los individuos a menudo eligen resistir la presión del grupo está relacionada con su deseo de mantener el control sobre sus vidas. Muchas personas desean creer que pueden determinar lo que les sucede y ceder a la presión social puede ir en contra de este deseo. Seguir al grupo implica adoptar un comportamiento que uno no elegiría de manera habitual y esto puede ser visto como una restricción a la libertad. En resumen, vemos dos motivaciones para reducir la tendencia a la conformidad: el 54 deseo de mantener nuestra individualidad y el deseo de mantener el control sobre nuestras propias vidas. La gente que no puede adoptar un comportamiento de conformidad Por ejemplo, consideremos las personas discapacitadas, estas pueden llevar una vida plena y participar en muchas actividades. Sin embargo, no pueden seguir algunas normas sociales debido a sus limitaciones físicas. Los homosexuales también se enfrentan con dificultades para seguir las normas sociales, participan en relaciones estables y les gustaría adoptar la norma social que consiste en que dos personas que se aman pueden contraer matrimonio, lo cual no era posible en muchos países. La influencia de la minoría: ¿Siempre lleva el mando la mayoría? Los individuos pueden resistir la presión del grupo, las pequeñas minorías pueden cerrarse en banda y rechazar seguir al grupo. En casos estas personas pueden dar la vuelta a la situación siendo ellas las que pasen a ejercer influencia sobre la mayoría. Es probable que las minorías lo logren bajo ciertas condiciones: los miembros de tales grupos deben ser conscientes en su oposición a las opiniones de la mayoría, si ellos dudan su impacto se reduce; los miembros de la minoría deben evitar parecer rígidos y dogmáticos, una minoría que repite la misma posición una y otra vez es menos persuasiva que una que demuestra algún grado de flexibilidad; el contexto social general en el cual la minoría funciona es importante, si una minoría pelea por una postura que es consistente con las tendencias sociales actuales, son mayores sus oportunidades de influir en la mayoría que si peleara por una postura que estuviera fuera de las grandes tendencias. Los resultados sugieren que las minorías cuyas posturas ganan pueden estar de alguna manera asentadas de formas inestable al menos por un tiempo. La mayoría vencida experimenta reacciones negativas mientras que la minoría muestra reacciones positivas más débiles. Como resultado, la minoría puede estar en una posición vulnerable. La condescendencia: pedir -a veces- es recibir La condescendencia: principios subyacentes Cialdini decidió que la mejor manera de entender a condescendencia era estudiando a los profesionales de esta (vendedores, publicistas, inversores, políticos…) y a partir de este estudio, describió los seis principios básicos en los que se basan las técnicas para conseguir condescendencia: ● Amistad/simpatía: estamos más dispuestos a complacer las peticiones de nuestros amigos o de los que nos agradan más que las de extraños o de gente que no nos gusta. ● Compromiso/consistencia: una vez que nos hemos comprometido con una postura o acción estamos dispuestos a acceder a solicitudes de comportamiento coherentes con dicha postura que a peticiones inconsistentes con ella. ● Escasez: valoramos e intentamos asegurar oportunidades que son escasas o que pueden disminuir en su disponibilidad, y así tenemos más disposición a 55 condescender ante solicitudes que se centren en oportunidades que pueden desaparecer que ante las que no. ● Reciprocidad: estamos más dispuestos a condescender ante solicitudes de alguien que previamente nos hizo un favor o concesión que ante otro que no lo haya hecho. ● Validación social: mostramos más disposición a condescender a actuar de determinado modo, si dicha acción es consistente con lo que creemos que personas similares a nosotros hacen. ● Autoridad: estamos más dispuestos a condescender a las peticiones de alguien que tiene una autoridad legítima o que parece tenerla. Tácticas basadas en la amistad o la simpatía: congraciarse Las tácticas de manejo de la impresión se emplean con la intención de congraciarse (conseguir gustar a los demás para que así estén más dispuestos a condescender a nuestras peticiones). Una de las técnicas que mejor funcionan es la adulación, alabar de alguna manera a los demás. La adulación no tiene que centrarse en el receptor para tener éxito, puede consistir en adulaciones a alguien cercano a este individuo. Otras técnicas que parecen funcionar son la mejora de la apariencia personal, emitir muchas claves no verbales positivas y el hacer pequeños favores a estas personas. Tácticas basadas en el compromiso de consistencia: el pie-en-la- puerta y el amago (“low ball”) La táctica del pie-en-la-puerta consiste en inducir a las personas a acceder ante una petición inicial pequeña para luego acceder a una petición mayor, la realmente deseada. Los resultados indican que esta táctica funciona porque se basa en el principio de compromiso: una vez que uno ha dicho si a la petición pequeña, es más probable que también diga si a las peticiones mayores debido a que rechazarla podría ser inconsistente con nuestra conducta previa. Otra es la técnica del amago, la cual es empleada por los vendedores de automóviles, que ofrece una buena oferta al cliente, sin embargo luego que el cliente ha aceptado, sucede algo que hace necesario que el vendedor cambie la oferta, haciéndola menos ventajosa para el cliente. La reacción racional sería que el cliente se marchase, sin embargo se conforma con los cambios y aceptan el arreglo menos favorable. Por lo que un compromiso inicial parece hacer más difícil que un individuo diga que no, incluso cuando las condiciones hayan cambiado ahora. Tácticas basadas en la reciprocidad: las técnicas de la puerta-en- la-cara y “esto no es todo” El principio de reciprocidad sirve de base para varias de las técnicas que se emplean para obtener condescendencia, como la opuesta a la técnica pie-en-la- puerta. En vez de comenzar con una petición pequeña y escalar hacia una mayor, las personas comienzan con una gran petición y luego, cambian a una petición menor, denominada la puerta-en-la-cara. En cuanto a la técnica “esto no es todo”, la petición inicial es seguida por algo que 56 La obediencia destructiva: sus bases psicosociales Los psicólogos han detectado una serie de factores que parecen jugar un papel crucial a la hora de acatar órdenes. 1. La primera, las personas que tienen autoridad examinan a los que les obedecen de la responsabilidad de sus actos. Muchos se defienden diciendo “solo estaba recibiendo órdenes”. En situaciones reales este traspaso de responsabilidad se asume en que la persona al cargo tiene la responsabilidad de lo que suceda. 2. Segundo, las personas con autoridad suelen poseer insignias o signos visibles que reflejan su estatus, consisten en uniformes especiales, chapas, títulos; los cuales sirven para recordar a muchas personas la norma social: “obedece a las personas con cargo”. 3. La tercera base hace referencia a la intensificación gradual de las órdenes de la autoridad: las órdenes iniciales exigen acciones ofensivas, posteriormente las directrices van aumentando su alcance hasta llegar a requerir un comportamiento peligroso o censurable, de cierta manera, las autoridades emplean la técnica del pie-en-la-puerta. 4. Finalmente, en muchos casos los acontecimientos cambian rápidamente, lo cual deja poco tiempo para reflexionar a los participantes o para procesar sistemáticamente la información: se les ordenan que obedezcan y automáticamente lo hacen. En resumen, los altos niveles de obediencia en los estudios de Milgram no son tan misteriosos como parecen, pues existen varios factores que de manera conjunta pueden hacer muy difícil a los individuos resistirse a las órdenes que reciben. La obediencia destructiva: resistir sus efectos Primero, responsabilizando a los propios individuos expuestos a la autoridad del daño que produzcan. Segundo, indicando a los individuos que la sumisión incuestionable a órdenes destructivas es inapropiada, para el cual utilizan un procedimiento que consiste en mostrarles diversos modelos de obediencia. Tercero, a los individuos puede resultarle más fácil resistirse a la influencia de una autoridad si se cuestionan la competencia y motivos de dicha figura. Finalmente, conocer ese poder de la autoridad de disponer de ciega obediencia también puede ayudar, por lo que estudios sugieren que cuando los individuos conocen los resultados de las investigaciones sobre psicología social, los reconocen como importantes en correspondencia. El poder que tienen las figuras autoritarias para generar obediencia es importante pero no irresistible, bajo condiciones apropiadas se puede rebatir o reducir, aunque puede llegar a ser peligroso. 59 Adoctrinamiento intenso: la influencia social llevada al extremo El adoctrinamiento intenso es un proceso a través del cual los individuos se vuelven miembros de grupos extremos y llegan a aceptar creencias y reglas de los grupos de una manera totalmente incuestionable y altamente comprometida: Este adoctrinamiento intenso implica cuatro estadios diferentes. Estadios del adoctrinamiento intenso ● En la primera o fase de ablandamiento, los nuevos miembros son aislados de los amigos, familia y se hace un gran esfuerzo para mantenerlos confusos, cansados desorientados, la principal meta es que los nuevos se separen de su vida anterior. ● La segunda es conocida como condescendencia, se les pide a los reclutados que se pongan al servicio de las demandas y creencias del grupo que activamente experimentan el rol de miembros. ● A continuación, tiene lugar la internalización, los reclutados comienzan a aceptar las perspectivas del grupo como correctas y creen en ellas. ● Finalmente, en el estadio de consolidación, los reclutados fortalecen su membrecía a través de su implicación en actos costosos que hacen difícil su retorno: donan todas sus pertenencias al grupo, cortan todas las relaciones con su familia y sus amistades anteriores. El resultado es que los nuevos miembros ahora aceptan las creencias y filosofías del grupo de una manera incuestionable y pasan a mantener perspectivas negativas acerca de “los de fuera”. 60 Procesos psicosociales: ¿Por qué tiene éxito el adoctrinamiento intenso? En estos grupos se hace un esfuerzo para poner a los miembros en un estado que maximice el impacto de las tácticas de la influencia social empleadas en cada una de las etapas descritas anteriormente. Esto incrementa susceptibilidad a los esfuerzos del grupo para cambiar sus actitudes y comportamiento. El estado resultante de la capacidad de atención reducida juega un rol clave de cada uno de los estadios descritos anteriormente. Otros factores psicosociales intervienen durante el estadio de consolidación, aquí los individuos que han hecho afirmaciones públicas apoyando las posturas del grupo o que se han comprometido en acciones tales como donar sus posesiones al grupo, pueden experimentar una fuerte disonancia acompañada por fuertes motivos que justifican tales acciones. 61 Las variables de entrada son: ● Aspectos de la situación actual, así como la frustración, algún tipo de ataque de otra persona, la exposición a otras personas que se comportan de manera agresiva, la presencia de señales asociadas con la agresión y cualquier cosa que cause que los individuos experimenten malestar. ● Tendencias que los indiviudos llevan consigo a una situación dada, así como rasgos que predisponen a los individuos hacia la agresión, ciertas actitudes, creencias, y valores acerca de la violencia y habilidades específicas relacionadas con la agresión. De acuerdo con la teoría moderna, estas variables pueden conducir a una agresión abierta a través de tres procesos básicos: ● Activación, pueden aumentar la activación fisiológica o excitación; ● Estados afectivos, pueden activar sentimientos hostiles y sus correspondientes signo externos. ● Cogniciones, pueden inducir a los individuos a tener pensamientos hostiles o a traer a la mente recuerdos hostiles. Dependiendo de las interpretaciones de los individuos de la situación actual y de los factores restrictivos, la agresión ocurre o no. Las teorías modernas como la GAAM (teoría moderna) son más complejas que aquellas ofrecidas por Freud y Lorenz, o incluso por la hipótesis frustración- agresión, pero tienen muchas más probabilidades de dar un retrato preciso y completo de los orígenes de la agresión humana. 64 Determinantes de la agresión humana: sociales, personales, situacionales ¿Cómo puede estudiarse la agresión humana (especialmente física) de una manera sistemática sin el riesgo de dañar a los participantes en ese tipo de investigaciones? Técnicas para estudiar la agresión humana: ¿Dañar sin riesgo? La solución que Buss formuló parece ser muy similar a la técnica desarrollada por Milgram. Sin embargo, ambos desarrollaron sus técnicas de investigación simultáneamente, pero de forma independiente. Buss realizó la máquina de la agresión, un aparato utilizado para medir la agresión física bajo condiciones controladas de laboratorio; la cual parecía que era un medio para estudiar lo que realmente harían cuando se viesen en situaciones donde es posible la agresión. Esta máquina onsta de botones que dan cargas eléctricas como señal de castigo. Buss pensaba que si los participantes tenían libertad de escoger cualquier choque que quisieran, mediría el deseo de los participantes de dañar al asistente de investigación. Las preguntas de que si “presionar botones en una máquina de la agresión realmente proporciona una medida válida de la disposición de los individuos para dañar a otras personas” o si “los psicólogos sociales se estaban engañando a sí mismos al confiar en esos procedimientos” nunca han sido totalmente resueltas por lo que se han ideado técnicas adicionales para medir la agresión en condiciones controladas de laboratorio. Por ejemplo, en la conocida como el Paradigma de la Sustracción del Punto y la Agresión (PSAP), los participantes juegan contra un oponente que en realidad es ficticio en el que cada uno de ellos puede decidir presionar botones que den dinero al oponente, quiten dinero del total del oponente o protegen contra la posibilidad de que el oponente le quite el dinero al jugador. Estas y otras técnicas relacionadas, si proporcionan medidas válidas y útiles de la agresión humana. Primero, muchos estudios han encontrado que las personas con conducta agresiva real escogen choques más fuertes o sustraen dinero de sus oponentes en el PSAP más a menudo que aquellas que no la tienen. Muchos investigadores han concluido que los procedimientos desarrollados por Buss y por muchos otros psicólogos sociales sí proporcionan la disposición de las personas de infligir daños a otro ser humano. Sin embargo, incluso los defensores de estos métodos admiten que no son perfectos. Determinantes sociales de la agresión: frustración, provocación, agresión desplazada, violencia en los medios de comunicación y activación intensificada En este apartado mencionaremos algunas de las más importantes causas sociales, personales y situacionales de la agresión. Frustración: por qué no obtener lo que quieres (o lo que esperas) puede algunas veces conducir a la agresión La hipótesis de la frustración-agresión sugiere que la frustración es un determinante muy fuerte de la agresión y sostiene que las personas frustradas 65 siempre agreden. Las investigaciones indican que cuando los individuos están frustrados, no siempre responden con agresión sino que muestran reacciones distintas por lo que la agresión, definitivamente, no es una respuesta automática a la frustración. En su forma original, esta hipótesis hacía dos aseveraciones radicales: ● La frustración siempre conduce a alguna forma de agresión. ● la agresión siempre proviene de la frustración. En resumen, esta sostenía que todas as personas frustradas llevaban a cabo algún tipo de agresión y que todos los actos agresivos, en consecuencia, provenían de la frustración. Pero estas afirmaciones no es que sean correctas, pues la evidencia existente sugiere que estas dos partes de la hipótesis asignan demasiada a la frustración como determinante de la agresión humana. Así, vemos que… ● No toda la agresión proviene de la frustración ya que las personas se agreden por muchas razones diferentes y en respuesta a muchos factores diferentes. ● A la vista de esto, pocos psicólogos sociales ahora aceptan la idea de que la frustración sea la única causa de la agresión. Debido a esto, pocos psicólogos sociales aceptan la idea de que la frustración tenga alguna importancia como causante de la agresión. Así, Berkowitz propuso una versión modificada de la hipótesis de la frustración-agresión en la que la frustración algunas veces produce agresión debido a un vínculo básico entre afecto negativo y conducta agresiva. Provocación directa: cuando la agresión produce agresión La provocación consiste en acciones llevadas a cabo por otros, que tienden a provocar agresión en quien las recibe, a menudo debido a que son percibidas como provenientes de intenciones maliciosas. A menudo la agresión es el resultado de la provocación física o verbal de los demás y cuando somos nosotros los que las recibimos tendemos a corresponder, devolviendo tanta agresión como hemos recibido, o quizás más, especialmente si estamos seguros de que la otra persona quería dañarnos. Agresión desplazada: los efectos de las provocaciones triviales La agresión desplazada es la agresión contra alguien distinto a la fuente de una fuerte provocación inicial y ocurre por que las personas que la llevan a cabo no desean o son incapaces de agredir a la fuente inicial de la provocación. Los psicólogos sociales se refieren a esas reacciones como ejemplos de desencadenamiento de la agresión desplazada: un evento desencadenante leve por parte de una persona, da como resultado que esa persona se transforme en el blanco de una fuerte agresión desplazada, una agresión intensa que resulta una verdadera sorpresa para la persona en cuestión ya que es desproporcionada. 66 específicos pueden activar esquemas u otras estructuras de conocimiento en nuestras mentes, y de esta manera influir en nuestros pensamientos y juicios. Por ejemplo, después de vernos expuestos a estímulos que activan la disponibilidad del rasgo “deshonesto” (por ejemplo, palabras como “ladrón”, “crimen” y “prisión”) podemos interpretar una discreción ambigua de otras personas como sugeridora de que él o ella son deshonestos porque hemos sido activados a pensar en esos términos. Han planteado que estos efectos pueden ocurrir en lo relacionado al lazo sexo- agresión. Cuando nos vemos expuestos a estímulos de contenido sexual podemos activarnos para pensar acerca de la agresión, o incluso para comportarnos de manera agresiva. También sugiere que ya que el sexo y la agresión pueden estar vinculados en la mente tanto de hombres como mujeres, la influencia de estos vínculos puede variar según el género. Específicamente, debido a que los hombres son más a menudo los agresores en las situaciones sexuales, la activación con estímulos sexuales puede activar no sólo los pensamientos agresivos, sino también las acciones agresivas. Por el contrario, no se esperaría que esto ocurriera en el caso de las mujeres. El lazo entre el sexo y la agresión puede ser más complejo de los que se creía. No sólo la activación sexual influye en la agresión a través de la generación de afecto positivo y negativo, sino que la exposición a estímulos de contenido sexual puede activar esquemas u otros sistemas mentales que pueden influir en la conducta abierta hacia objetivos específicos. Causas personales de la agresión Mientras algunos individuos casi nunca se enojan o llevan a cabo acciones agresivas, otros parecen enojarse a cada momento, con consecuencias potencialmente serias. Consideraremos diversos rasgos o características que parecen jugar un papel importante en la agresión. 69 Patrón de conducta tipo A: por qué la A en tipo A puede significar agresión Una persona competitiva, siempre con prisa y especialmente irritable y agresiva muestra las características de lo que los psicólogos han denominado patrón de conducta tipo A. Así, el patrón de conducta tipo A es un patrón que consiste principalmente en altos niveles de competitividad, apremio de tiempo y hostilidad. En el extremo opuesto del continuo están las personas que no muestran estas características, individuos que no son altamente competitivos, que no están siempre peleando con el reloj u que no se enojan fácilmente, estas personas son descritas como poseedoras del patrón de conducta tipo B. De este modo, el patrón de conducta tipo B es un patrón que consiste en la ausencia de las características asociadas con el patrón de conducta A. En muchas situaciones los Tipo A tienden a ser más agresivos que los Tipo B. Hallazgos adicionales indican que los Tipo A son personas verdaderamente hostiles: no sólo agreden a los demás porque sea un medio útil de alcanzar otras metas, sino que tienen más probabilidades que los Tipo B de llevar a cabo una agresión en la que el objetivo primordial es infligir algún tipo de daño a la víctima (agresión hostil: agresión en la que el objetivo principal es infligir algún tipo de daño en la víctima). Por el contrario, los Tipo A no tienen más probabilidades que los Tipo B de realizar una agresión para lograr otras metas a parte de dañar a las víctimas (agresión instrumental: agresión en la que la meta principal no es dañar a la víctima, sino lograr alguna otra meta, como el acceso a recursos valiosos), metas como el control de recursos valiosos o ser elogiados por otros por hacerse el “duro”. Percibir intenciones malvadas en otros: sesgos de atribución hostiles Si estamos en un śupermercado y alguien nos empuja con el carrito y, a continuación, no se disculpa tenemos claro que sus acciones provienen de intenciones hostiles, pero si después de golpearte te dice “oh, lo siento. Por favor discúlpeme”, parece que realmente lo lamenta, hay muchas posibilidades de que no te molestes. Esto es debido a que nuestras atribuciones sobre las causas de la conducta de los demás juegan un papel importante en la agresión. El sesgo de atribución hostil es una tendencia a percibir intenciones o motivos hostiles en las acciones de los demás, cuando estas acciones son ambiguas. Las personas con un nivel alto de este sesgo, rara vez dan a los demás el beneficio de la duda, simplemente asumen que cualquier acción provocadora de los demás es intencional y reaccionan en consecuencia. Narcisismo: amenaza al ego y agresión: los peligros de querer ser superior Los hallazgos de las investigaciones indican que este rasgo puede estar relacionado con la agresión. Los estudios de Bushman y Baumeister sugieren que las personas con un nivel alto de narcisismo reaccionan con niveles excepcionalmente altos de agresión ante los desaires de los demás. Diferencias de género en la agresión: ¿Existen? Los hombres manifiestan una incidencia más alta de conductas agresivas que las mujeres. Primero, los hombres tienen más probabilidades que las mujeres de agredir a otros 70 cuando estas personas no los han provocado de ninguna manera. En situaciones en las que la provocación está presente, las mujeres pueden ser tan agresivas como los hombres. Segundo, el tamaño, e incluso la dirección, de las diferencias de género en la agresión, varía dependiendo del tipo de agresión de que se trate. Los hombres tienen más probabilidades que las mujeres de llevar a cabo varias formas de agresión directa, (ataques físicos, empujar, hacer caer a alguien...) Sin embargo, las mujeres tienen más probabilidades que los hombres de llevar a cabo varias formas de agresión indirecta (esparcir rumores malintencionados, cotillear a las espaldas...). Tercero, los hombres y las mujeres también difieren considerablemente con respecto a otro tipo de agresión, la coacción sexual. Esta conducta implica palabras y acciones pensadas para vencer las objeciones de otra persona a tener relaciones sexuales, las cuales pueden variar desde tácticas verbales como falsas promesas de amor, hasta amenazas de dañar y la fuerza física real. Los hombres tienen muchas más probabilidades de llevar a cabo este tipo de conducta que las mujeres. Determinantes situacionales de la agresión: una mezcla de altas temperaturas y el consumo de alcohol La agresión se ve influida por los factores sociales y las características personales, pero también se ve afectada por factores relacionados con la situación o el contexto. Alcohol y agresiones: una mezcla potencialmente peligrosa La existencia de un vínculo alcohol-agresión. En varios experimentos se ha encontrado que los participantes que consumían dosis de alcohol se comportaban de forma más agresiva y respondían a las provocaciones de manera más fuerte que aquellos que no lo consumían. 71 La prevención y el control de la agresión: algunas técnicas útiles La agresión no es una forma de comportamiento inevitable o inalterable. Por el contrario, debido a que la agresión proviene de una compleja acción recíproca de eventos externos, cogniciones y características personales, esta puede ser prevenida o reducida. En esta sección final, consideramos varios procedimientos que cuando se utilizan apropiadamente pueden ser efectivos para reducir la frecuencia o intensidad de la agresión humana. Castigo: ¿Una disuasión efectiva para la violencia? El castigo consiste en una serie de procedimientos consistentes en aplicar consecuencias aversivas a los individuos cuando llevan a cabo acciones específicas. Este puede tener éxito para disuadir a los individuos de llevar a cabo muchas formas de comportamiento. Sin embargo, estos efectos no son ni automáticos ni seguros. ¿Qué condiciones deben cumplirse para que el castigo tenga éxito? Hay cuatro que son las más importantes: ● Debe ser contingente, debe seguir a las acciones agresivas tan pronto como sea posible ● Debe ser seguro, la probabilidad de que siga a la agresión debe ser muy alta ● Debe ser fuerte, lo suficientemente fuerte para ser altamente desagradable para los posibles receptores ● Debe ser percibido por los receptores como “justificado” o merecido. Catarsis: ¿Sacar la ira fuera realmente ayuda? La hipótesis de la catarsis, plantea que si los individuos dan salida a su ira y hostilidad de formas relativamente no dañinas, se reducirán sus tendencias a llevar a cabo tipos de agresión más peligrosos. Por un lado, la participación en diversas actividades que no son dañinas para los demás puede reducir la activación emocional que proviene de la frustración o la provocación. 74 Desafortunadamente, estos efectos parecen ser temporales. La activación proveniente de la provocación puede reaparecer tan pronto como los individuos traen a la mente los incidentes que los enfadaron. La idea de que llevar a cabo acciones agresivas “seguras” reduce la probabilidad de formas más dañinas de agresión. Los resultados de las investigaciones son los siguientes: ● La agresión abierta al parecer no se reduce por ver escenas de violencia en los medios de comunicación, atacar objetos inanimados o agredir verbalmente a los demás. De hecho, algunos hallazgos sugieren que la agresión puede en realidad verse incrementada por estas actividades. Hallazgos como estos sugieren que la catarsis no parece ser un medio muy efectivo de reducir la agresión. Participar en formas “seguras” de agresión, o en actividades donde se drena energía, puede producir reducciones temporales de la activación, pero los sentimientos de ira pueden regresar rápidamente cuando los individuos se encuentran con o simplemente piensa en las personas que previamente los molestaron. Intervenciones cognitivas: disculpas y superar los déficits cognitivos Las disculpas contribuyen en gran medida a reducir la agresión. Igualmente, las buenas excusas pueden ser muy efectivas para reducir la ira y la agresión abierta de las personas que han sido provocadas de algún modo. Cuando estamos muy enfadados, nuestra habilidad de pensar con claridad puede reducirse bruscamente. Cuando esto ocurre, las restricciones que sirven para contener la agresión pueden disminuir. Cualquier procedimiento que nos ayude a evitar o superar esos déficits cognitivos puede ser útil para reducir la agresión. Una de estas técnicas supone una preatribución, es decir, atribuir las acciones molestas de los demás a causas no intencionales, antes de que la provocación realmente tenga lugar. Otras técnicas para reducir la agresión: exposición a modelos no agresivos, entrenamiento de habilidades sociales y respuestas incompatibles Se han desarrollado y probado muchas otras técnicas para reducir la agresión abierta, a continuación presentaremos otras que parecen muy efectivas: Exposición a modelos no agresivos: el contagio de la contención Cuando los individuos que han sido provocados observan a otras personas que muestran o piden moderación, la tendencia de los potenciales agresores a responder agresivamente se reduce. Estos hallazgos sugieren que puede ser útil colocar modelos moderados y no agresivos en situaciones tensas. Su presencia podría muy bien inclinar la balanza hacia el lado contrario a la violencia abierta. Entrenamiento en habilidades sociales: aprender a llevarse bien con los demás Una razón por la cual muchas personas se ven involucradas en encuentros agresivos, es su gran carencia de habilidades sociales. Estas personas no saben cómo responder a las provocaciones de los demás de manera que se calmen en lugar de molestarse, además, no saben cómo hacer peticiones o como decir que no 75 a las peticiones de los demás, sin que estos últimos se molesten. Dotar a personas con una falta de habilidades sociales básicas, con mejores habilidades sociales puede contribuir a la reducción de la agresión. Afortunadamente, existen procedimientos para enseñar a los individuos estas habilidades, y no son muy complejos. Por ejemplo, tanto adultos como niños pueden adquirir rápidamente mejores habilidades sociales al ver a otras personas que muestra conductas tanto efectivas como no efectivas. Respuestas incompatibles: es difícil seguir enfadado si sonríes La técnica de la respuesta incompatible plantea que si un individuo se ve expuesto a eventos o estímulos, que lo hacen experimentar estados afectivos incompatibles con la ira o la agresión, estas últimas se reducirán. El humor, una activación sexual moderada y los sentimientos de empatía hacia la víctima son todos efectivos en este sentido. Por supuesto, esta técnica puede extralimitarse: tratar de que alguien se ría cuando ya está muy enfadado puede fracasar y hacer que se enfade aún más, pero si se utiliza al inicio del proceso los esfuerzos para reemplazar los estados internos negativos, como la molestia, por unos positivos, pueden ser muy efectivos. 76
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